sábado, 11 de septiembre de 2010

mother, i want to...

Todos sabemos que en el mundo de la música a veces se encuentran parecidos entre artistas muy diferentes.
En el caso de hoy, el parecido que os voy a intentar explicar, es el que hay entre Jim Morrison e Iggy Pop.

Iggy Pop nació en Michigan. Asistió a un concierto de The Doors en 1967, en la Universidad de Michigan. Desde ese momento, Iggy encontró un referente: Jim Morrison. Quedó impactado por las performances que se habían llevado a cabo en el escenario, por su voz y su manera de actuar y moverse.
Desde entonces, él fue un ejemplo a seguir para el joven Pop, que más tarde inventaría el 'stage-dive' (lanzarse al público durante el concierto) y se convertiría en uno de los mayores cantantes en hacer que cada concierto fuese algo más: un espectáculo.

Mientras que a Jim se le conoció como El Rey Lagarto, a Iggy se le llamó La Iguana (nombre que procede del primer grupo que formó Pop).

Ambos tienen grandes voces y grandes letras (aunque muy diferentes); mientras que Jim Morrison es considerado un poeta, Iggy Pop confiesa en una de sus entrevistas: "Hacemos rock estúpido, rock para la estúpida gente común. A eso yo le agrego algo de inteligencia extra. No demasiada, sólo un poco."


Pero hay algo que me llamó mucho la atención el otro día, mientras escuchaba la primera canción del disco The Idiot, de Pop.
Hay una frase edípica en esa canción que no pude evitar que me recordase a The End, de los Doors.
En el caso de Sister Midnight, la situación es narrada como si ésta ya hubiese ocurrido y, además, es el padre quien persigue al cantante para matarlo. En The End, todo sucede en forma de diálogo, y es Morrison el que informa a su padre de que le quiere asesinar.

Iggy Pop (Sister midnight): "Mother was in my bed and I made love to her. Father he gunned for me, hunted me with his six gun..."
The Doors (The end): "-Father...
                                   -Yes, son?
                                   -I want to kill you! Mother... I want to fuck you!"


Y ahora, escuchad las dos canciones, no muy parecidas ciertamente pero, como ya he demostrado en las líneas anteriores de esta entrada, con unos detalles en común un tanto preocupantes.
Disfrutad.





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